Julie nos traslada a la Camarga, un territorio que parece estar dominado por el reino animal. Toros libres, caballos salvajes, flamencos, aves migratorias, es definitivamente un mundo aparte. Hecho de tradiciones taurinas, todavía vive el folklore, el viento, el sol, los arrozales y las salinas. Julie está por Marie Sara, una de las pocas mujeres que monta a caballo. En la Camarga, las tradiciones culinarias están bien desarrolladas en gardiane, sepia y anguilas recién capturadas, sin olvidar las otras especialidades locales de Aigues Morte y Saintes-Maries-de-la-Mer.