Jesús Núñez, director del Instituto de Conflictos y Acción Humanitaria, nos cuenta cómo Siria se desangra. Desde el mes de marzo casi 8.000 personas han muerto. Las últimas víctimas han sido la periodista estadounidense Marie Colvin y el fotógrafo francés Rémi Ochlik.La población civil se hacina en refugios sin alimentos y en pésimas condiciones mientras los heridos tienen que ser tratados en domicilios particulares.