La calma ha vuelto hoy a Barcelona. Después de las agresiones de ayer a los diputados catalanes por parte de grupos de indignados, el Parlamento ha recuperado la normalidad, pero sin olvidar, ni mucho menos lo ocurrido. La fiscalía ha abierto diligencias para investigar los incidentes violentos y la mesa del Parlamento estudia también qué acciones legales va a emprender.El presidente de la Generalitat, Artur Mas ha dicho que habrá más detenciones y que actuará con contundencia frente a unos actos que ha calificado de kale borroca.La Unidad que mostraron ayer todos los partidos políticos a la hora de condenar la violencia, hoy se resquebraja. En Cataluña la oposición dice que el operativo policial fue insuficiente y en el Congreso de los Diputados el PP ha responsabilizado al vicepresidente y ministro del interior, de la deriva del movimiento 15-M. Rubalcaba ha dicho que se actuará con firmeza ante los violentos y con prudencia con los pacíficos y que su interés es la seguridad de los