Por las caras tan serias que se veían esta mañana en los comités de dirección de UGT y Comisiones Obreras, nadie hubiera dicho que anoche se consiguió lo que hace no muchos días parecía imposible. Un acuerdo a tres bandas, con gobierno y patronal, con la reforma de las pensiones y un plan de choque para el paro como platos principales. En las reuniones de UGT y de Comisiones había rostros más bien serios, aunque dicen que están muy satisfechos. Algo más relajada se ha mostrado la cúpula de los empresarios que también se ha reunido esta mañana.
