Cuando aún no se han terminado de evaluar los daños de las grandes olas de este fin de semana, llega otro temporal a la cornisa cantábrica. Toda la costa se mantiene en alerta. Lo más complicado se espera en Galicia, con alerta roja y con vientos huracanados de hasta 140 kilómetros por hora. En algunas localidades de Lugo han suspendido las clases por precaución, y se recomienda evitar las actividades al aire libre. La borrasca se irá desplazando hacia el este y afectará también a Asturias, Cantabria y País Vasco donde también van a tener mucho viento y, de nuevo, olas gigantes.