En Egipto, los manifestantes no se retiran de la plaza Tahrir. La presión para el presidente Mursi, no sólo está en la calles, y en ese últimatum que ha lanzado el ejército. Viene también de dentro, de su gobierno. Seis ministros han dimitido, y no se descarta en pleno una renuncia del ejecutivo. Según los militares no barajan un golpe de estado, y el último mensaje del presidente ha sido para decir que seguirá trabajando para la reconciliación nacional. Una última hora informa de que el Gobierno de Canadá ha anunciado que mantendrá cerrada su embajada en El Cairo ""hasta nuevo aviso"" por razones de seguridad. Es el primer país en tomar tal medida.