Lo sucedido con el cuadro trae cola y Alonso busca un culpable. No es difícil porque el responsable da la cara delante de toda la familia. Para Catalina, Simona es como una madre y por eso acude a ella en busca de consejo sobre Adriano. El problema es que quizás la cocinera no le diga lo que esperaba oír. María Fernández sigue esperando noticias de Samuel. La doncella se aferra a Manuel, su última esperanza para descubrir qué ha sido del sacerdote. Cristóbal insiste en hacer suya La Promesa con más cambios y más insatisfacción entre sus subalternos. La decisión de Manuel sobre la empresa es toda una revolución para Toño y Enora, que lo celebrarán de una forma especialmente romántica.