Presionado por Leocadia, Alonso convence a Catalina y a Adriano para que acepten al duque de Carvajal y Cifuentes como padrino de sus hijos, apartando los desplantes que el hombre ha hecho al joven padre. Los intentos de Manuel para que Toño confiese su engaño no dan su fruto y tiene que ser él mismo quien se lo diga a la cara. Eugenia, abrumada por los últimos episodios de olvido, empieza a desvariar, situación que fomenta Leocadia utilizando a los hijos de Catalina. Petra comienza a organizar el bautizo y se encuentra con la actitud hostil de María Fernández. La doncella muestra su preocupación a Samuel por su excomulgación, pero el sacerdote cree que no es preocupante. Rómulo confiesa a Pía y a Ricardo el beso que se dio con Emilia. La enfermera anuncia al mayordomo su próxima marcha de La Promesa, sin explicarle que no está casada, como él piensa.