Jana confirma el fallecimiento de Pía y la noticia se extiende por el palacio con discreción. El Marqués quiere que, para evitar el escándalo, digan que Pía se ha ido con su hijo al pueblo y oculten su muerte por suicidio. El servicio no tiene más remedio que acatar las órdenes a pesar de su gran tristeza. Margarita y Ayala se las prometían muy felices, pero Martina arremete delante de todo el mundo contra Ayala, la situación ha llegado a un extremo intolerable. La relación entre Adriano y Catalina avanza un poco al conectar emocionalmente. María Fernández está muy afectada por que Petra destruyera sus notas para el libro y Lope recibe una brutal paliza. Virtudes se enfrenta a su madre al descubrir que está visitando a su hijo. María Antonia cuida de Cruz, pero su interés por Alonso la llevará a cruzar una línea sagrada que pondrá en peligro su amistad con la marquesa y la propia relación de Cruz con Alonso.