En menos de una semana los termostatos de comercios, estaciones de tren o autobús, cines, teatros o supermercados no podrán estar a menos de 27 grados. Y a partir de las 10 de la noche, se apagarán todos los escaparates. Comerciantes y hosteleros reprochan que no se hayan consensuado y reclaman ayudas.