Llegaron a acosar a sus víctimas incluso en su casa. La policía arrestó a un grupo de quince menores, de entre catorce y dieciséis años, acusados de vejar, humillar y agredir presuntamente a dos hermanos de trece y quince años de edad. Habían dejado de ir a clase debido al maltrato que, aseguran, sufrían. La consejería de educación ha abierto una investigación. Le consta que una de las supuestas víctimas había sido expulsada del instituto mientras que su hermano sumaba varias faltas de asistencia, justificadas por la familia. Los agresores ya están en libertad pero les han requisado el móvil.