Son los primeros pasajeros que llegan a Barajas con PCR negativa en origen. La normativa que entra en vigor hoy obliga a los visitantes de países de riesgo a mostrar una prueba con 72 horas de antelación. Quien no la traiga podrá realizársela en el aeropuerto, pero se enfrentan a una multa de hasta 6.000 euros.