Hay cauces aparentemente secos donde excepcionalmente puede haber agua. Aquí, en las montañas, las pequeñas gotas de lluvia, forman charcas temporales y, a veces, permanentes. A este tipo de charca la llaman localmente "wadi", que significa "cauce" en árabe. Este wadi, un raro oasis,es, aunque no lo parezca, un salvavidas para la fauna silvestre. Los valles fluviales que las surcan están expuestos a largos periodos de sequía y repentinas inundaciones. Uno de los animales más raros de Arabia... y del mundo, el Tar de Arabia, (quedan menos de dos mil quinientos ejemplares de estos animales en peligro de extinción) en Los montes de Al Hajar son su último refugio. Una amenaza letal acecha en las sombras, la tarántula. En el mundo existen cerca de un millar de especies de tarántula. Es exclusiva del ecosistema de wadis. Por la noche, una pequeña luz ultravioleta revela la presencia de un mortífero escorpión. Otros animales como saltamontes, avispas y luciérnagas o la mosca de la carne, atra