En 1918 el carguero italiano Participation era hundido frente a las aguas de Villajoyosa por el submarino alemán que comandaba Robert Moraht. Karlos y su equipo tratan de encontrar los paravanes que llevaba el buque en cubierta, unos sistemas para detectar y destruir minas submarinas. Tras un primer intento en el que no encuentran el pecio, en la segunda inmersión logran su objetivo.