Pocas cosas expresan mejor el salvaje Oeste que el imponente aspecto de un bisonte, auténtico icono de las tierras salvajes norteamericanas. Sin embargo, domesticar el Oeste significó eliminar su propio icono: la caza interminable, prácticamente lo aniquiló para siempre. Algunos de los últimos bisontes salvajes encontraron un refugio seguro en el parque nacional de Yellowstone, y es aquí donde comenzamos, a través de la vida de un macho de bisonte para seguir su viaje desde el día de su nacimiento. Al seguir a nuestro héroe, somos testigos del espíritu indomable de un auténtico superviviente, un icono perdurable de América.