El nuevo gobierno griego confirma sus prioridades ante la Unión Europea y entre ellas el aumento del gasto público y la renegociación de la deuda. Alexis Tsipras asegura que buscará un acuerdo viable y justo que beneficie a todos y pide tiempo a Europa para hacer reformas profundas en su país. A dos escaños de la mayoría absoluta, la izquierda radical de Syriza ha encontrado el apoyo que necesita en la derecha nacionalista con la que comparte esos dos objetivos: el rechazo a la austeridad y la necesidad de reestructurar la deuda.La Unión Europea se muestra dispuesta al diálogo pero insiste en que Atenas debe cumplir los compromisos que tiene con sus socios y acreedores y seguir con las reformas estructurales en su economía. Empieza una etapa de largas y seguramente difíciles negociaciones entre Bruselas, Berlín y Atenas, pero el primer choque del nuevo gobierno griego con sus socios no ha sido económico sino diplomático. El mismo día que anunciaba su gobierno, Alexis Tsipras expresaba