El rey Felipe VI ha llamado en su tradicional mensaje de Navidad (pdf.) a "defender, cuidar y proteger" la convivencia, que ha definido como "la obra más valiosa" de la democracia, el "mayor patrimonio de los españoles" y el "mejor legado que confiar a las generaciones más jóvenes"; y ha instado a "evitar" que dicha convivencia –"que siempre es frágil"- se "deteriore" o "erosione", para apostar por "una voluntad decidida de concordia, paz y entendimiento". La convivencia ha sido el eje que ha vertebrado todo el discurso del monarca en el que, sin citar a Cataluña, ha defendido "los profundos vínculos que unen y que siempre deben unir a los españoles". Felipe VI ha apostado por una convivencia "que es incompatible con el rencor y el resentimiento" porque esas actitudes, ha alertado, "forman parte de nuestra peor historia y no debemos permitir que renazcan".