El desplazamiento de las bajas presiones hacia el Golfo de Génova unido a la entrada de altas presiones por el oeste irá estabilizando la atmósfera lentamente en la Península. Sin embargo, los restos de la borrasca Martinho mantendrán los cielos muy nubosos con precipitaciones en la mitad norte peninsular. Se prevén más abundantes en entornos de montaña y especialmente en el Cantábrico donde es probable que sean persistentes, siendo en general débiles y ocasionales en el resto. La inestabilidad también afectará a Baleares, con chubascos acompañados de tormenta y ocasionalmente de granizo menudo y con probabilidad de llegar a localmente fuertes. Se darán nevadas en montañas de la mitad norte peninsular y en el este de la meseta Norte, siendo posibles también en montañas del sureste. Son probables los acumulados significativos en el sistema Ibérico, este del Central y cordillera Cantábrica, sin descartarse en el este de la meseta Norte. La cota de nieve se situará en torno a los 1300/150
