Julia parece decidida a dar el paso de confesarle a Tirso lo que siente por él, pero esta vez es ella quien se retrae en el último momento. Entre eso y el fracaso de su reunión con el distribuidor de muebles, Julia empieza a pensar que la culpable de que todo le salga mal es ella misma. Olga, ahora que su hijo y ella empiezan a estar más cerca el uno del otro, cree llegado el momento de revelarle a Erik una verdad que le ha ocultado durante años. Carmen, desgarrada por la noticia de que Kiros y Enoa van a casarse, intenta averiguar cómo ha podido cambiar todo de un día para otro, y llega al extremo de contarle a Enoa que aquel amante suyo de la metrópoli del que tantas veces le habló… no es otro que Kiros. Inés idea un modo de que Ángel pueda preparar sus exámenes: conseguir aplazar la reunión con el matrimonio de tabaqueros, los Suárez. Pero para ello necesitan la ayuda de Alicia. La muchacha se aviene a hacerle a Ángel ese favor… aunque le pide algo a cambio