Tráfico de drogas, blanqueo de dinero, trata de seres humanos, extorsión...estas actividades de grupos criminales internacionales están relacionadas con el comercio de mercancías falsificadas. Un negocio que supera los 200.000 millones de euros al año. Los intentos de control en puertos y aeropuertos, desborda a los servicios aduaneros y a las fuerzas de seguridad.