Nunca antes fue tan caro alquilar o comprar una vivienda en España. La imposibilidad de encontrar precios asequibles está propiciando una nueva modalidad de compraventa o alquiler: los pisos se ofrecen con gente viviendo dentro. La nuda propiedad, una fórmula que permite vender manteniendo su uso al antiguo propietario, ha aumentado hasta un 11.3 % en el último año. Crece también el número de inversores que compra casas ya alquiladas, y muchos jóvenes comparten piso con personas sin hogar, pagando entre 150 o 450 euros al mes.Con los precios descontrolados, los impagos de alquileres se multiplican y llevan a la ruina a muchos propietarios. Los inquilinos morosos deben 7.600 euros de media a sus arrendadores. Siete de cada diez desahucios se explican por este motivo y se estiman en 25.000 los nuevos casos de este tipo de ocupación al año. ¿Qué estaría usted dispuesto a hacer por conseguir un hogar donde vivir?