Basta con nombrar el producto para saber su procedencia y viceversa: con sólo evocar un pueblo, nos viene a la cabeza aquel alimento que elaboran, cultivan o capturan mejor que nadie. ¿En qué piensan si les hablamos de Sanlúcar, Idiazábal, Jabugo, Las Pedroñeras o Cantimpalos? En todos estos lugares encontramos unos productos de calidad superior únicos en el mundo.