'Comando actualidad' muestra la situación de los festejos taurinos en España y el negocio que hay detrás de ellos. En plaza han bajado hasta un 61% en los últimos doce años, según el Ministerio de Cultura. Un centenar de municipios han vetado la lidia y las celebraciones taurinas. Más allá del debate, ¿sigue siendo un imán para turistas? ¿Qué esconde la carne de toro? ¿Es posible una España sin toros? Antes de que comience el espectáculo en la Plaza de las Ventas, ganaderos, veterinarios, apoderados y decenas de profesionales eligen los toros y organizan la corrida. Un toro de lidia puede valer desde 3.000 euros hasta 24.000. Canarias, Cataluña, Baleares, Gijón y un centenar de municipios españoles han vetado la lidia y los festejos taurinos. Cuando termina el festejo en una plaza, la carne del toro bravo se destina a consumo humano. Y no sólo el famoso rabo de toro. De toda la ganadería de toro bravo que hay en España, el 40% de la carne acaba en la cazuela después de pasar por una pl