A pesar de que el negocio de cultivar flores no va bien y de la insistencia de su madre en que vuelva a ejercer de médica, Amy Campbell persiste, con la ayuda de su marido John, en rebrotar la plantación familiar de la Isla de las Flores, en el condado inglés de Cornualles. La situación se complica cuando John acepta el puesto de profesor de literatura en la ciudad donde vive Maggie, la madre de Amy, con la que esta mantiene desde siempre una relación conflictiva. Amy, ante la necesidad de personal para su plantación, contrata un capataz, un misterioso irlandés que se ha presentado de improviso en la isla buscando trabajo, y con el que enseguida sintoniza. Mientras, John, que se ha trasladado a vivir a la mansión de Maggie, descubre parte del secreto, relacionado con un trágico suceso familiar del pasado, que explicaría la conflictiva relación entre su suegra y su esposa. La otra parte, que completaría
