Patience Portefeux trabaja como traductora de árabe para la policía de París. Tratando de encubrir al hijo de la mujer que cuida a su madre, Patience se involucra en un asunto de drogas, teniendo acceso a un gran cargamento de cannabis. Simultaneando su trabajo en la brigada antidroga, se convertirá en la famosa distribuidora de droga, Mamá María.