Dos bandas de cuatreros son perseguidas por los habitantes de un pueblo acusados del asesinato de tres mujeres. Sin posibilidad de defenderse, huyen hacia la frontera de México, llevando consigo de rehén a Bárbara, mujer del reverendo del pueblo, uno de los cabecillas de la persecución. Las bandas de Bill y de Casell mantienen la unidad hasta que se refugian en un fuerte habitado por mexicanos, donde debido al largo asedio al que son sometidos y a los reproches por la presencia de la mujer, comienza el enfrentamiento entre ellos.