A causa de la pandemia por la Covid-19, los casos de depresión han aumentado de forma considerable y esto provoca mayor riesgo de padecer problemas bucales. Los problemas más frecuentes son: la depresión provoca mayor dolor dental, la depresión aumenta los niveles sanguíneos de cortisol, componente inflamatorio que incrementa el riesgo de enfermedad periodontal (la famosa piorrea) y la depresión provoca que apretemos más los dientes (el famoso bruxismo) provocando problemas en la articulación ATM. Los efectos secundarios de los antidepresivos incrementan el riesgo de caries y de patología en las encías, ya que estos medicamentos producen sequedad bucal, la saliva es un elemento protector que si no se segrega provoca que estemos indefensos ante ciertas bacterias. A esto además hay que sumarle que el paciente depresivo descuida su higiene general y por supuesto la higiene bucodental por la falta de ánimo. Además de que suelen tener una dieta inadecuada, abandona sus revisiones dentales y