Es Ponce, el presunto parricida y padre de los dos niños asesinados hace dos años en su casa de Vistabella, en Tenerife. Hoy se ha declarado inocente ante la jueza. Culpa a Sonia, su mujer y madres de los pequeños, de haber asfixiado a Tindaya y Joseba, de 11 y 5 años de edad. Ella, declara mañana. La fiscalía pide para ellos 40 años de prisión.