En las décadas 40 y 50 del siglo XX miles de canarios se embarcan en veleros rudimentarios que viajan clandestinamente hacia Venezuela. A pesar de las penurias de la navegación y los accidentes, muchos llegan a las costas venezolanas. Unos triunfaron económicamente, otros subsistieron en condiciones muy pobres, todos ellos rememoran sus vicisitudes, reconstruyen su aventura y reflexionan sobre el fenómeno migratorio de las pateras Subsaharianas que llegan a Canarias en la actualidad.