El Congreso aprueba con el 85% de votos la ley orgánica de abdicación del ReyLa visita de Estado del presidente mejicano se convierte en un homenaje al Rey y un espaldarazo a Felipe VI.En el palacio de la Zarzuela, sede oficial y personal de la jefatura del Estado, Don Felipe prepara cuidadosamente su discurso de proclamación. Será el más personal y posiblemente  el más importante de su vida. Todos los ojos estarán puestos en él. Por eso trabaja con intensidad y dedicación, recibe aportaciones de sus colaboradores y -con toda seguridad- escucha  la opinión y el consejo de su padre, el Rey. Don Juan Carlos no estará el jueves en el Parlamento porque quiere que todo el protagonismo ese día sea para su hijo, Felipe VI.