Clara Lago busca la imagen de Marina, el personaje que interpreta en su próxima película, una fotógrafa de los años cincuenta, en un lugar imaginario, la isla de El Hierro, una roca en medio del Océano donde se respira la magia de ver surgir algo de la nada. Un lugar de cuento donde sentir el placer de ejercer un oficio y sorprenderse de la existencia de personajes como el hombre de piedra o la mujer sabina, el hombre pez o la mujer de barro, y de ver al fotógrafo invisible.