Las aguas de la Bahía de Portichol en Jávea, Alicante, son cristalinas y cálidas la mayor parte del año. Sus bahías naturales son verdaderos puertos refugio. Y lo son desde la más remota Antigüedad. Así lo vamos a comprobar gracias a una expedición submarina a uno de sus pecios. Nadie diría al pasear por Can Pastilla, en Mallorca, que justo al lado de la orilla, a unos 50 metros del rebalaje, un barco de época romana guarda su milenaria carga a vista de los turistas. Y es que el mar es el mayor yacimiento arqueológico que tenemos a nuestro alcance.