En las casas de los Ibáñez y los Romaña se viven momentos de tensión: Ambas familias se preparan para la última sesión del juicio. Silvia no se siente del todo segura, y Nuria cada vez está más sobrepasada. En el hotel, Mabela y Arturo han pasado la noche juntos. Parece que el exalcalde está llamando a la puerta del amor. ¿Le abrirá ella? ¿O recibirá un portazo en las narices? Marifrán, con la ayuda de Yago, le ha dado un pequeño giro a su negocio. Y es que es muy importante atender las necesidades de la clientela, aunque estas no sean del todo legales¿ ¿Qué opinará Blanca de todo esto cuando se entere? Justo ahora que intentaba hacer las cosas bien. La relación entre Paco y Elsa cada vez está más debilitada. ¿Recuperarán la chispa que han perdido?