Jimeno le enseña a Marta sus dibujos. Todos ellos hechos en papel recogido de la basura. A Marta le llama la atención uno de ellos. Detrás de él, descubre un dato que podría darle un giro de 180 grados a la situación de Diego y Paula. En casa de Marifrán, Angelita espera con ansia hablar con su hija. Pero el reencuentro no sale tal y cómo la camarera esperaba. En una situación similar se encuentra Silvia. La gerente tampoco pensaba que fuera a ser abuela tan joven y se siente como un pez fuera del agua ante esta nueva realidad. Mientras tanto, Bea se ve obligada a hacer de cebo para capturar a su acosador durante las jornadas de salud mental de Vera. ¿Consiguen atraparle?