A los 6 años el mexicano Juan Pedro Franco ya pesaba alrededor de 60 kilos, y tras tener un accidente de tránsito a los 17 y guardar cama durante años, su peso llegó a ser de 595 kilos. Llegó a figurar en el Libro Guinness como el hombre más obeso del mundo, pero luego logró perder casi la mitad de su peso y hoy, después de varias intervenciones quirúrgicas, se siente más motivado y esperanzado que nunca y tiene sus enfermedades bajo control. Conozcan más de su historia en Entrevista, de RT.