Denunciar la corrupción policial puede salir muy caro incluso en la tierra de la libertad. Al estadounidense John Mark Dougan le costó perderlo todo cuando vio su vida tan amenazada que decidió huir de su país dejando atrás a su familia y solicitar asilo político… en Rusia, país que sigue acogiéndole. Pese a que sus acciones iban dirigidas a destapar los trapicheos y abusos dentro del cuerpo de Policía del condado de Palm Beach, las autoridades se dedicaron a perseguirlo e investigarlo a él.