Si alguien no ve al ser humano como un laberinto por el que vagan todas las contradicciones es porque no conoce a Jhon Jairo Velásquez, alias 'Popeye'. Sicario del señor de la droga Pablo Escobar, se confiesa espiritual pese a admitir que no tiene alma; autor de más de 250 asesinatos, pasea por los escenarios de sus crímenes para acoger con una sonrisa el cariño de los medellinenses mientras afirma, sin asomo de ironía, que no entiende por qué lo agreden por la calle. Bienvenidos al laberinto.