EE.UU. pierde influencia política en América Latina, pero despliega cada vez más comandos especiales en la zona bajo el pretexto de la lucha contra el narcotráfico. China avanza hacia el principal socio de Latinoamérica. Y los seguidores de la abogada Lynne Stewart, acusada de conspiración con los terroristas, levantan las voces para su liberación.