La sexta Cumbre de las Américas celebrada en Colombia agravó la brecha entre sus miembros, que se vieron divididos por el conflicto de las Malvinas y la legalización de las drogas. Varios países boicotearon el foro protestando contra la exclusión de Cuba. Mientras, ciertos expertos critican la política intervencionista de EE. UU. en América Latina