La nueva ciberestrategia de EE. UU. autorizaría acciones militares en respuesta a un ataque virtual. Mientras tanto, los Emiratos Árabes Unidos pretenden crear un ejército de mercenarios para sofocar rebeliones con la ayuda del fundador de la compañía “Blackwater”. Escenario, que, según algunos, representa un grave peligro para los derechos humanos