En Chateau Thuriès, Jayne y Steve intentan dar nueva vida a su suite principal. Mientras que para Jayne fluye la creatividad, a Steve no le resulta fácil instalar las puertas dobles altas. Matt y Helen intentan dar un toque británico a su castillo francés en forma de quiosco de música inglés. Ben y Billie se embarcan en un proyecto colosal para renovar su salón de baile del siglo XIX. Pero antes de que puedan empezar las obras, tienen que crear un nuevo estudio para que Billie pueda guardar sus materiales artísticos en el salón de baile.