Una ruptura sentimental unida a la gran dependencia psicológica de Judith llevará a un paciente de la joven a permanecer ilegalmente en el rellano del tercer piso, provocando nuevos problemas. Tras haber sido abandonado por su mujer, un paciente habitual de Judith decide permanecer sine die en el rellano del tercer piso de Montepinar 7 debido a su excesiva dependencia psicológica de la terapeuta.