La presentadora había acudido antes a Villa Montaña para otorgar a los chicos la oportunidad de "ver a su chica durante diez minutos", les comunicó. "Tengo que ser yo, tío", empezó a decir por lo bajo Montoya a uno de sus compañeros. Después, los participantes votaron quiénes pensaban que tenía que disfrutar de ese privilegio y, aunque decidieron por unanimidad que fuese Montoya, las lágrimas se desataron entre ellos.