Alejandro, un amante de las procesiones, trabaja en construir una estructura que permita proteger a las imágenes divinas de la lluvia. La idea consiste en una especie de paraguas construido a partir de una estructura metálica que sustenta una cubierta de plástico. Hasta el momento, el emprendedor ha invertido 400.000 euros y cuatro años para llevar a cabo este invento. (12/04/2014)