Kendal buscará desesperadamente a Sibel y al que él cree que es su hijo, pero Kasim intentará detenerlo y enfrentarse a él antes de que pueda dar con el paradero de ambos y que ocurra una desgracia. Entre tanto, la familia Samverdi, más unida que nunca, buscará un hogar donde poder quedarse tras haberse quedado sin su mansión, devorada por las llamas.