Aitor, a sus más de 40 años, está pidiendo un préstamo en el banco para poder comprarse una casa para independizarse y salir de la de sus padres. El director del banco se niega a concederle el crédito y Aitor monta en cólera. Sin haberlo premeditado acaba amenazando con un rifle al director y atracando el banco. Candela, la hija de Cruz, se encuentra allí junto a Héctor y ambos formarán parte de los rehenes.