Una pareja de adolescentes intenta suicidarse. Los padres de ambos se odian. Los médicos atienden a los jóvenes, pero no podrán hacer nada por ella. Sin embargo, algunos de los órganos quedarán aptos para transplantes. El chico permanece a salvo mientras esperan un corazón que le permita seguir viviendo. Los padres de la chica deberán decidir si el corazón de su hijo podrá permitir vivir a su novio.