Una semana después de la llegada de Aimé a la India, Rinku sigue sin dar señales de vida, desanimado y enfermo, el médico se dispone a volver a España cuando Sira recibe una llamada que puede dar pistas sobre el paradero. Aimé emprende una búsqueda que le sumerge en la parte más profunda y marginal de la sociedad hindú.