Devin no puede olvidar que Aslan no hizo nada por evitar la muerte de su tío Ibo y su actitud respecto a sus sobrinos empeora aún más su relación. La psicóloga está decidida a cumplir su promesa a Leyla aunque eso suponga enfrentarse de lleno a su marido. Bedri intenta ganar terreno en los negocios del puerto, pero Aslan no está dispuesto a permitírselo. Sin tener las cosas muy claras, llega el día de la pedida de mano para Eko.