Ser extranjero le ha traído muchas críticas pero él considera que ha sido una ventaja para escribir sobre la monarquía española. "Creo que ser extranjero me ha permitido escribir sobre la monarquía española con distancia. Cuando comencé este proyecto en 2010, había escándalos como el de Urdangarín y Corinna que se empezaban a tratar en la prensa. Puedo hacer preguntas obvias. Desde el suceso de Botsuana, se empezó a hablar y a cuestionar", explica.